El arte de escuchar

«Por favor, no trates de entenderme desde el intelecto. No soy un intelectual, de hecho soy anti-intelectual. No soy un filósofo, soy muy anti-filosófico. Trata de comprenderme. Escucha en silencio sin charla interior, sin el parloteo interno, sin evaluar. No te estoy diciendo que creas lo que te estoy diciendo, te estoy diciendo que no hay porqué apresurarse en aceptar o rechazar.

Primero, al menos, escucha, ¿por qué tanta prisa? Cuando ves una rosa, ¿la aceptas o la rechazas? Cuando ves una hermosa puesta de sol, ¿la aceptas o la rechazas? Simplemente la ves, y el mismo ver es un encuentro.  Si lo que estoy diciendo contiene algo de Verdad en sí, será comprendido por tu corazón, pero la mente ha de apartarse. Y entonces, no tendrás necesidad de cambiar tu vida para adecuarte a eso; cambiará por sí misma.» (Osho)

Uno de los grandes problemas de las sociedades industrializadas, es la incomunicación. Cuesta prestar atención  a los demás y casi siempre nos quedamos  con la  sensación de haber dejado escapar algo importante, por no escuchar atentamente.

 Según Osho, hay varios tipos de escucha, dependiendo del centro que estemos usando. Resumo el texto:

La escucha intelectual: significa que cuando estás escuchando, simultáneamente estas argumentando en tu interior. Tiene lugar un constante debate, sobre si ésto es correcto o no. Así que, constantemente, mientras me escuchas, sopesas si confirmo tus ideas o no, si estoy de acuerdo contigo o no, si lo aceptas o no, si te convenzo o no. Cuando la mente está llena de sus propias ideas, colorea todo lo que le llega. Escoge, descarta, interpreta, y sólo entonces algo penetra, pero tiene ya una forma distinta.

Tu mente se entromete, vayas donde vayas, ella va antes que tú. Hay una identificación sutil: «Mi mente soy yo». Por eso digo : «Soy un comunista» o «Soy católico» o «Soy hindú». Nunca digo: «Mi mente se ha desarrollado de tal forma que mi mente es hindú». Este es el hecho: tú no eres hindú.  Sólo la mente lo es.

 La mente es un ordenador. Mantente constantemente alerta sabiendo que tu mente no es tu consciencia. Consciencia es la energía; mente es sólo el contenido de ideas. ¡Sé su amo!, haz que te siga, úsala, pero no seas usado por ella. Es un instrumento, pero nos identificamos con este instrumento.»

La escucha emocional: Estás escuchando música u observando una danza; no te acuerdas del intelecto, empiezas a participar, te vuelves parte de ella. Este es un modo de escuchar desde el sentimiento; más profundo que el intelecto. Eso es porque, siempre que eres capaz de escuchar con tu corazón y sentimientos, te sientes transportado a algún lugar. No estás en este mundo, ¿por qué?, porque no perteneces al mundo del intelecto. Se abre una dimensión distinta, empiezas a estar activamente en ella.

El intelecto es siempre un observador desde afuera, nunca desde dentro. Por eso, cuanto más crece lo intelectual en el mundo, más nos volvemos pasivos observadores. En todo. No bailarás, verás a otros bailar.
En el momento que te mueves con el sentir, tu mente está abierta. Más abierta que cuando estás en constante disputa. Está abierta, receptiva, invitando.

La escucha total: un modo es contemplar la danza con el intelecto; otro es sentir la danza y empezar a participar en ella. Y el tercero es volverse la danza misma. No el danzador, sino la danza. La totalidad del ser está implicada. No estás afuera siquiera para percibirlo: ¡Tú eres ello!

Cuando la totalidad se hace presente, no es que se reniegue del intelecto o que se reniegue del sentimiento. Ellos están ahí, pero ahora están sumidos en una diferente armonía.
Por eso, cuando escuchas, hazlo como si te hubieras convertido en el escuchar en sí. Cuando digo algo, déjalo que penetre en ti, sin lucha, sin emotividad, sino de un modo total. ¡Sé ello!. Experiméntalo y comenzarás a vivir una nueva dimensión de la escucha. Y esto no sólo es válido para el acto de escuchar: lo es para todo.

Cualquier división es un desperdicio de energía. Sólo este movimiento total puede llevarte a una vivencia en dónde no se puede encontrar al ego. Puede ser hallado con el intelecto, puede ser hallado con el sentimiento, pero excepcionalmente, con todo tu ser.»

23 comentarios

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23 Respuestas a “El arte de escuchar

  1. alma9

    Gracias por poner el vídeo del diálogo interior, Ágora, es muy bueno.
    En mi caso aparte del diálogo interior, a veces hablo sola y en voz alta. Un caso extraño, o quizá no. 🙂
    Observar estos diálogos es muy divertido y siempre es posible cambiarlos. Si somos constantes en la observación podemos ir eliminando ciertas pautas de pensamiento que se repiten habitualmente.
    Respecto a lo que dice Osho, supongo que hay que ser un practicante habitual para conseguir unos resultados de «escucha total», aunque creo que lo importante es aprender a escuchar sin juzgar, aunque sea de vez en cuando. Pasa como con los diálogos internos, una vez que somos conscientes de lo que estamos haciendo, es más fácil darse cuenta en el momento adecuado y corregir. Todo un reto.
    Esa consciencia que es energía, puede captar muchos matices que son inaccesibles al intelecto. Si éste interfiere se pierde la parte más importante de la información: lo que hay detrás de las palabras que también es una energía
    Saludos a todos

    • hola, alma9 … ligeros «trucos» de edición; me alegro que te parezca adecuado el planteamiento a tu trabajo …

      la cuestion es que nuestro diálogo interno, generalmente obedece a programaciones externas artificiosas … pocos instantes tenemos en los cuales nos encontramos en «ondas»
      diferentes a las mundanas, pues las constantes conversaciones obligatorias, y los diálogos en la radio y televisión, condicionan
      nuestro modo de pensar, tan bárbaramente, que nos desintonizan, y mezclan con pensamientos ajenos …

      creo que es bueno, que nos demos cuenta de éstas cosas,
      pero sin preocuparnos demasiado … sólo interesándonos …

      • alma9

        La escucha y los diálogos internos no son excluyentes. Me parece muy importante aprender a escuchar a los demás, sin interferencias, porque esto ayuda a controlar esos diálogos y a darnos cuenta de que constantemente están ahí, intentando ser protagonistas de nuestra vida.
        Como dices lo principal es tener interés.
        Saludos

    • No creo que lo que dice Osho sea difícil, tú misma lo habrás experimentado y todos -al menos en algún momento.
      Los monjes mientras trabajan meditan. Son conscientes de la cesación de pensamiento y del diálogo intelectual de la mente, sienten y por tanto también observan lo que están sintiendo, al tiempo que trabajan y son conscientes de la acción y todo es uno.
      Recoge moras -o cualquier fruto- y puedes experimentar.
      Comenta en este blog y puedes estar experimentándolo, solamente hay que estar atentos, conscientes, presentes.
      saludos un poco tardíos.

  2. “El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.” 1 Corintios 13:4-7

    • Comienza ese himno de la Iglesia primitiva -San Pablo lo reflejó en Corintios- diciendo: «Aunque hablase todas las lenguas de hombres y ángeles si no tengo amor es como campana que suena o tímbalo que retiñe…». Y esto es así porque el amor dota de sentido y contenido lo que de otra manera seria vana conceptualización.
      Es por eso que las verdades más profundas solamente se alcanzan con el corazón. Esa es la diferencia entre la sabiduría y la pedantería.
      Un abrazo.

  3. alma9

    Estoy viendo tu video roverdosroverdos 🙂 es muy interesante.
    Al margen del post, acabo de pasar por el ign y curiosamente tenemos varios pequeños seísmos en zonas costeras, a 10 km de profundidad. ¡Ay, la tecnología!
    http://www.02.ign.es/ign/layoutIn/sismoListadoTerremotos.do?zona=1&cantidad_dias=10

  4. Declaración de los Ancianos Hopi

    “Le has estado diciendo a la gente
    que ésta es la undécima hora.
    ¡Ahora debes volver y decirle a la gente
    que ésta es la hora!
    Y hay cosas que deben considerarse:
    ¿Dónde estás viviendo?
    ¿Qué estás haciendo?
    ¿Cuáles son sus relaciones?
    ¿Estás en la relación correcta?
    ¿Dónde está tu agua?
    Conoce tu Jardín.
    Es hora de hablar tu verdad.
    Crea tu comunidad.
    Sé bueno contigo mismo.
    Y no busques fuera de ti
    un líder.

    ¡Éste podría ser un buen momento!
    Hay un río que fluye muy rápido.
    Es tan grande y rápido
    que hay quienes tendrán miedo.
    Ellos se aferrarán a la orilla.
    Ellos sentirán que se los está destrozando,
    y van a sufrir mucho.
    Sepan que el río tiene su destino.
    Los ancianos dicen que
    debemos soltarnos de la orilla,
    empujarnos hacia el medio del río,
    mantener los ojos abiertos,
    y la cabeza por encima del agua.
    Ver quién está allí con ustedes
    y celebrar.

    En este momento no debemos tomarnos nada personalmente,
    mucho menos a nosotros mismos.
    Porque en el momento en que lo hacemos,
    nuestro crecimiento espiritual se detiene.
    El tiempo del lobo solitario ha terminado.
    ¡Reúnanse!

    Destierren la palabra lucha
    de su actitud y su vocabulario.
    Todo lo que hagamos ahora debe hacerse
    de una manera sagrada y en celebración.
    Nosotros somos aquellos a los que hemos estado esperando.”

    Los Ancianos, Oraibi, Arizona, Nación Hopi

    • «Destierren la palabra lucha
      de su actitud y su vocabulario.
      Todo lo que hagamos ahora debe hacerse
      de una manera sagrada y en celebración.
      Nosotros somos aquellos a los que hemos estado esperando.”

      Toda la declaración es de una gran sabiduría.

  5. FRANLIZ

    RESUMIENDO lo conseguiremos, aunque parezca una contradicción, lo mejor, es, que no ARTE, sino, quedar con ganas de ESCUCHAR.

    • Y cuanto más escuchas, más ganas de escuchar tienes: porque todo te interpela a TI.
      Siempre eres muy sintético en lo que dices. A veces me quedo con ganas de que nos cuentes más. Pero cada uno es de su forma y no por palabras dejas de aportar espíritu y verdad.

  6. Nuestra constitución interior es compleja,

    ésto es lo que nos indican las enseñanzas, y parte de las cuestiones que tenemos que aprender a descubrir, … desentrañar …

    aún cuando podemos identificarnos con esencias de las más altas procedencias, la estabilidad en lo temporal, es precaria

    cada ser enfrenta las cuestiones de diferente manera, pero todos tenemos territorios comunes,

    nuestra constitución astral, se manifiesta en los deseos y emociones,
    impulsos vitales que nos compenetran,

    nuestra constitución mental, nos facilita una serie de vehículos cognoscitivos, de la más alta estirpe,

    observemos serenamente, pues nos falta lo principal, aquello,
    de lo cual nada decimos,

  7. ariesBertha

    Que hermoso ¡ Leer esto casi a la media noche, y repetir la frase final
    VAS A LLEGAR ¡¡¡¡¡¡ te da impulso para retomar un nuevo amanecer con fe y esperanza. Gracias.
    PD Aunque el día que dejas atrás haya sido un desastre. Siempre cae algo del cielo cuando se necesita.

    • Siempre cae del cielo MÁS de lo que se necesita.
      En estas dos últimas semanas me han caído del cielo tres generaciones: mis amigos, mis hijos y los hijos de mis amigos y los nietos respectivos. Todos ellos SI son mi esperanza -incluidos vosotros, claro-.
      Abrazos.