las palabras, los símbolos, la inspiración

Posiblemente en el mundo, hay estudios maravillosos, símbolos, doctrinas que encierran sabidurias inmarcesibles. Cada tradición, cada época, vá manifestando aspectos más sorprendentes de las incógnitas que se manifiestan en el universo. Supongo que debe de haber cosas bellas.

También hay como una tendencia, a que cada tradición genere un cuerpo de doctrina, lenguajes y símbolos que lo caracterizan en determinadas coordenadas, las cuales son alentadas por los seres y los conjuntos.

Posiblemente, cada ser es libre, o al menos teóricamente debiera de serlo, de decidir las vías en las cuáles efectúar el camino ascendente de el Alma, que sería la comprensión y vivencia de la Verdad.

La indicación que trato de efectúar en éste blog, es que recordemos, que cualquier cuerpo de enseñanza, requiere prioritariamente la aquiescencia e inspiración creadora de el Espíritu, que no olvidemos que ésa es nuestra gran búsqueda y esperanza, y que por ello, seamos conscientes, de con qué vestiduras queremos revestirlo.

LA COMPRENSION DE LA VERDAD, SE REALIZA SIN DECIRLO.

Actualmente, la Ciencia ya ha comprobado, que es posible alterar la cognición y los sentimientos, incluso atmosféricamente, y por medio de «energías electromagnéticas», lo cual, es algo muy importante, para que podamos comprender toda la ciencia de los fenómenos, por ejemplo, los ingredientes que producen las guerras y violencias de «géneros», las diferentes polaridades e intereses, que forman la vida.

Bertha
3 noviembre, 2015 en 12:15

Ya te digo, con la llegada de Mariham se me ha quedado el dedo en el otro post. Si, pero ya lo he despegado.
Nuestros “cuerpos”, si, tienen toda la apariencia de ser como los creemos ver con Nuestra Mente. No nos olvidemos, por correr tanto, que quien traduce las cosas como quiere es esa parte del cerebro, que yo la llamo la camara oscura (por eso de que no le llega la luz). Y ahi esta, es el hardware principal instalado en un traje. Luego entre pitos y flautas en algún lugar “fuera del traje” andan los softwares llenitos de programas muy variados. El cuerpo como tal – yo creo – ni pincha ni corta. O sea sé, una vestidura mona que lleva y trae a la nube-consciencia, que por supuesto no tiene forma ni contextura, solo cualidades innatas, si asi se puede definir lo dificilmente definible. Luegoooooo….. no hay incidencias que reseñar que afecten a “esta substancia” llamada nube-conciencia, ni el sol,ni la supuesta luna, ni las estrellas.
Lo que si pudiera ser que le afecte es otro tipo de “substancias” similares que tengan cargas – en tanto que ella las tenga +, por ejemplo. Es decir nuebes-consciencia de la misma naturaleza pero con cualidades distintas. Un hombre blanco es un animal racional y un hombre amarillo tambien, son de la misma naturaleza, solo que uno tiene cualidades como fuerza, o habilidad y el otro no, pero tiene flexibilidad corporal.

Voy haciendome comprender…?

UNA INTERPRETACION DE LAS ENSEÑANZAS CRÍSTICAS. Según documentos de el Dr. Maurice Nicoll.

alma9
31 octubre, 2015 en 1:40 pm

🙂 lo siento, hoy es el día de las visitas casi inesperadas
He hecho un resumen (demasiado largo), pero me sugiere tantas cosas que no se por donde empezar a escribir, jaja
Si tomamos la esfera de consciencia:
-El alejamiento del origen por la reversión de esa esfera hacia el exterior (big bang o proyección)-inicio del movimiento, entropia o aumento del desorden).
-La vuelta al origen, a través de la reversión de la entropía. Para ello hay que dejar de producir movimiento (ausencia de polaridades mediante la síntesis o tercera fuerza integradora). Otra opción es llegar al punto final donde el tiempo se agota a sí mismo e implosiona igualmente (big crunch o final de la proyección)

Aplicado a grandes ciclos, sería algo parecido Eón tras Eón
Aplicado a la sociedad actual:
Para que un ciclo sea más largo hay que equilibrar mediante modificaciones determinadas, el aumento descontrolado de esa entropía. En términos de tiempo sería como dice:
“La entropia es la consideración de el tiempo en su aspecto negativo: estamos acostumbrados a pensar en el devenir del cosmos como un progresivo venir-a-ser, pero en verdad se trata de un regresivo dejar-de-ser sin aniquilarse: se acumula una “escoria de ser”. No podemos pensar en un tiempo uniforme y lineal separado de las cosas, sino en un tiempo entrópico, que se degrada con el tiempo, tendiendo asintóticamente al fin del propio tiempo; o como satíricamente se podría decir: “el tiempo va a morir con el tiempo”
(o en la visión de Juan: “No habrá más tiempo” Ap 10, 6). ”
Sigo…. ( en comentarios )

roverdos
30 octubre, 2015 en 5:02

Intentaré dar mi impresión al respecto de la recuperación de aquellas frases, opiniones, mitos o incluso símbolos que nos hayan podido abrir ventanas, puertas o caminos por donde profundizar en nuestro entendimiento a lo largo de estos años de sincera colaboración,…

Lo que parece estar bastante claro es que no existe una relación clara de conjunto en esas aperturas cognitivas, por llamarlas de alguna manera, que individualmente nos hayan podido producir determinado grado de clarividencia a tenor de lo que aquí se ha venido exponiendo,… es bastante evidente que cada cual sigue procesos cognitivos diferentes y que algunas cuestiones mas que otras de las aquí planteadas, podrían coincidir en lo que podemos llamar saltos cualitativos de entendimiento,… pero que nos sitúan individualmente en diferentes perspectivas con arreglo a nuestros grados de percepción propia, maniobrando con los márgenes que nos permiten nuestras características álmicas individuales de las que sin ninguna duda para mi, siempre dependemos,…

Podríamos compararlo poniendo algo de nuestra parte con una hipotética singladura en la que trataríamos de alcanzar un puerto o continente al que llamaríamos Gnosis y que para ello lo primero que habríamos dispuesto es el hecho de convencer al capitán de nuestra nave (intelecto) de la vital necesidad de alcanzarlo, consiguiendo que este se preste honestamente para este fin,…
Una intrépida travesía a través de un océano de confusión en el que se habría de interpretar minuciosamente todas las señales posibles que nos ayudaran a conseguirlo.

Lo que en este circulo de compañeros y amigos tratamos de hacer es precisamente eso,… interpretar las señales adecuadamente evitando en todo lo posible caer en el engaño de las apariencias,… estas señales podrían representarse por los diferentes vientos que manejados adecuadamente nos harían avanzar hacia nuestro pretendido destino,… pero las condiciones de la nave (Alma) en las que cada uno de nosotros navegamos evidentemente no son las mismas, el mismo viento que a algunos podría hacerle avanzar mas rápido a otros les resultaría incomodo e incluso podría crear demasiada tensión en un aparejo que bien pudiera funcionar mucho mejor en otras circunstancias,… la mar, el mar en el lugar donde se encuentra cada nave puede reunir características muy diferentes y las tensiones que deben afrontarse individualmente pueden ser para algunas ciertamente de todo punto insostenibles,…
Como muy bien ha hecho notar nuestra amiga Alma9 los mismos vientos que nos sirvieron en un determinado momento para conseguir un avance significativo,… hoy podrían ser totalmente contrarios a nuestro propósito.

El Blog podría actuar así como un cuaderno de bitácora donde se reflejaron en el día a día los diferentes vientos que fueron aprovechados para llegar a donde nos encontramos actualmente,… pero aquellas maniobras por las que cada uno logró avanzar hacia su destino fueron determinadas por las características particulares de cada una de las naves interpretando las señales que observara según las capacidades marineras de su piloto,… así pues a día de hoy algunas de aquellas naves que emprendieron aquella singladura se encuentran mas o menos afectadas por los embates de las olas a las que tuvieron que enfrentarse, pero la experiencia y el aprendizaje de aquellos mares dejados ya atrás nos continua sirviendo para gobernarnos cada día con mayor conocimiento,…y es que ya,… casi que podemos oler a tierra… nueva …

Bertha
31 octubre, 2015 en 1:48 pm

Respecto al asunto que has tocado Alma9 sobre el inicio y fin de un ciclo, he encontrado esto otro que me parece interesante, pero es anterior a Penrose y los “descubrimientos científicos” posteriores al texto que pongo aqui :

“””Si consideramos especialmente la oposición del calor y el frío, esto nos conduce a considerar algunas cuestiones particularmente importantes que el Sr. Lasbax plantea a propósito de los principios de la termodinámica. Discute, bajo este punto de vista, la teoría del Dr. Gustave Le Bon, según la cual “conviene distinguir entre dos fases radicalmente opuestas de la historia del mundo” que forman “un ciclo completo: primero, condensación de la energía en forma de materia, después, gasto de esta energía”, es decir, disociación de la materia. Nuestro periodo actual correspondería a la segunda fase; y “como nada impide suponer que la materia, devuelta al éter, empiece de nuevo su fase condensadora, los periodos alternantes de la vida del universo deben sucederse sin fin: la hipótesis se completa en la idea antigua del ‘gran año’, en la concepción de Nietzsche del eterno retorno” (p. 195). Por nuestra parte, esta teoría nos hace pensar menos en el “gran año” de los persas y los griegos, periodo astronómico que aparece sobre todo ligado al fenómeno de la precesión de los equinoccios, que en los ciclos cósmicos de los hindúes, donde las dos fases que acaban de ser descritas están representadas como el día y la noche de Brahmâ. Además, se encuentra en la concepción hindú igualmente esta idea de la formación de todas las cosas a partir del éter primordial, al cual deben volver en la disolución final; el Dr. Le Bon debe saber esto sin duda tan bien como nosotros, pero nunca habla de estas coincidencias que son sin embargo bastante sorprendentes. Debemos añadir, no obstante, que las teorías cosmogónicas de la India no admiten el “eterno retorno”, cuya imposibilidad es además metafísicamente demostrable: de un ciclo a otro, nunca hay repetición ni identidad, sino solamente correspondencia y analogía, y estos ciclos se realizan, siguiendo la expresión del Sr. Lasbax, “en planos diferentes”; en verdad, no hay más ciclo que el nuestro actual que empiece y finalice en el éter considerado como el primero de los elementos corporales, pues no hay otro que se refiera a la existencia física. Resulta de ello que las condiciones de un ciclo no son aplicables a otros, aunque siempre deba haber algo que les corresponda analógicamente: así, el espacio y el tiempo son sólo condiciones especiales de nuestro ciclo, y no es más que de una manera totalmente simbólica como se podría transportar la idea fuera de los límites de éste para hacer expresable en alguna medida lo que no podría serlo de otro modo, estando el lenguaje humano necesariamente ligado a las condiciones de la existencia actual. “”” ( Este texto fue escrito en 1921 por Réne Guénon bajo el título de “Las Dualidades Cósmicas” en respuesta a un trabajo del Sr. Lasbax. Es un texto inédito y apareció por 1ª vez en “Etudes Tradicionales” 1972)