La relación de las ondas del espectro radiolectrico: Aquí demuestro que éstas cuestiones, SON CONOCIDAS POR LA CIENCIA. Por lo tanto, LO QUE ESTA SUCEDIENDO CON EL FENOMENO BIOLOGICO DEL CORONAVIRUS, ES UN GENOCIDIO CONSCIENTE. Consciente, posiblemente, para algunos.
Los Efectos Biologicos de las radiaciones de alta energia, se encuentran bastante documentos, SON REALIDADES perfectamente conocidas y documentadas en Ciencia. Éstas son LAS VERDADERAS CAUSAS, de la MANIPULACION CLIMATICA, y de la contaminacion ambiental. EN ESTE BLOG, ESTAMOS PIDIENDO COLABORADORES, PARA DAR A CONOCER ÉSTAS CUESTIONES:
La radiación de tipo electromagnético puede manifestarse de diversas maneras como ondas de radio, microondas, radiación infrarroja, luz visible, radiación ultravioleta, rayos X o rayos gamma.
Los efectos biológicos de las radiaciones electromagnéticas de alta energía. Uno de los efectos más importantes de las radiaciones electromagnéticas de alta energía (rayos ultravioleta, rayos X y γ) en las células es el daño directo o indirecto al ADN. Por lo tanto, tales radiaciones tienen un claro efecto mutagénico. En consecuencia, esto favorece el desarrollo de tumores en organismos pluricelulares y, cuando surgen mutaciones en las células germinales, puede conducir a diversos trastornos genéticos.
EN EL SIGUIENTE ENLACE, EFECTOS DE RADIACIONES SOBRE LAS BACTERIAS; el tema fundamental.
1. EFECTO DE LAS RADIACIONES SOBRE LAS BACTERIAS. TENEMOS MÁS DATOS ESPECIALIZADOS EN EL SIGUIENTE ENLACE.
1.1. CONCEPTOS GENERALES SOBRE RADIACIONES Y BIOMOLÉCULAS
Se puede definir la radiación como la propagación de energía por el espacio. Los principales tipos de radiaciones que pueden tener efectos sobre los seres vivos son:
radiación electromagnética | l (longitudes de onda, en nm) |
Radiación infrarroja (IR) | 800-106 |
Radiación visible | 380-800 |
Ultravioleta (UV) | 13,6-380 |
Rayos X | 0.14-13.6 |
Rayos g | 0.001-0.14 |
Rayos cósmicos | < 0.001 |
1) Si la energía es E>10 eV, hablamos de radiaciones ionizantes: son los rayos X y los rayos g .
«Para un organismo pluricelular las conscuencias de transmitir mutaciones a las células hijas pueden ser más graves que las de perder una célula y por eso se han desarrollado mecanismos que conducen a la muerte de la célula cuando el daño en el DNA no se ha podido reparar»
Seguimos en comentarios. Hacemos un llamamaiento a toda persona que comprenda la gravedad de éstas cuestiones, y la manipulacion DE LOS MEDIOS INFORMATIVOS, que ocultan al público éstas cuestiones:
2. EFECTOS DE LAS ONDAS SONORAS
Las ondas sonoras audibles para los humanos poseen un rango de frecuencias entre los 9 kilociclos y los 20 kilociclos/segundo. Por encima de 20 Kc se sitúan las ondas supersónicas (hasta los 200 Kc/seg) y las ultrasónicas (desde 200 hasta 2000 Kc/seg). Estos tipos de ondas de frecuencias superiores a las audibles (sobre todo las ultrasónicas) tienen el efecto de desintegrar las células.
El fundamento de esta acción es el siguiente: el paso del sonido a través de un líquido produce cambios de presión alternantes (por los sucesivos frentes de ondas), que a grandes frecuencias originan cavidades (burbujas de gases disueltos) de unos 10 m m de diámetro (fenómeno de cavitación). Dichas cavidades van aumentando de tamaño y terminan colapsando violentamente, dando lugar a enormes presiones locales (de hasta 1000 atmósferas o 10 Tm/cm2). Las consecuencias del colapso son:
la célula se desintegra;
si existe oxígeno en el líquido de suspensión, se forman peróxidos (como el H2O2);
despolimerización de macromoléculas;
cortes en ambas hebras del ADN.
Las bacterias son variables en cuanto a su susceptibilidad a las vibraciones sonoras. En general, son más sensibles las Gram-negativas y más resistentes las Gram-positivas. Sin embargo, ante un tratamiento por ultrasonidos siempre cabe la posibilidad de que sobrevivan algunos individuos, por lo que este método no tiene utilidad para la esterilización.El uso habitual de los supra- y ultrasonidos en laboratorio es para la llamada «sonicación» o disrupción ultrasónica de células para obtener extractos celulares, en investigaciones bioquímicas. El tratamiento se realiza en un aparato llamado generador de ultrasonidos o «sonicador», que opera en un rango de frecuencias desde 9 hasta 100 Kc/seg.
Respuesta celular al daño en el DNA
Para mantener la integridad del genoma, las células han desarrollado unos sistemas de vigilancia y unos sistemas de reparación del DNA. Así pues, una serie de proteínas están continuamente encargadas de vigilar el DNA para analizar si hay alguna base modificada o si hay cortes en las cadenas del DNA. Si eso se detecta, por una parte se para la proliferación de la célula y por la otra se intenta reparar el daño de la mejor manera posible. Las dos reacciones son muy importantes y hay moléculas encargadas de controlar todo este proceso. La finalidad de todo eso es evitar pasar el error a las células hijas. Hasta que el DNA no haya sido reparado la célula no continuará la división celular.
Pero, ¿qué pasa cuando los mecanismos de reparación no consiguen reparar el daño? Para un organismo pluricelular las consecuencias de transmitir mutaciones a las células hijas pueden ser más graves (tal como se verá después) que las de perder una célula y por eso se han desarrollado mecanismos que conducen a la muerte de la célula cuando el daño en el DNA no se ha podido reparar. De esta manera los errores no se transmiten a las células hijas. Esta muerte altruista y programada de la célula se llama apoptosis. En los últimos años se ha avanzado mucho en el conocimiento de las moléculas implicadas en los diferentes pasos de este proceso. Una molécula que ocupa un papel central en todos estos procesos de vigilancia, activación de la reparación e inducción de la apoptosis es la proteína p53, por ello, cuando se determinó su función se la llamó «guardiana del genoma». Cuando en verano tomamos el sol, y por tanto recibimos una buena dosis de radiación ultravioleta, aparecen muchos dímeros de timina en el DNA de nuestras células de la piel. Inmediatamente se activan todos estos sistemas que hemos explicado y, si pudiésemos ver los niveles de p53, veríamos que habrían aumentado mucho para permitir el paro de la proliferación, la reparación del daño ocasionado por las radiaciones en el DNA y, en caso de que sea imposible repararlo correctamente en algunas de las células, inducir su muerte. Hay familias que tienen alteraciones en los genes que codifican alguna de estas proteínas y por lo tanto éstas no hacen correctamente su función. Las consecuencias de eso son enfermedades hereditarias (xerodermia pigmentosa, ataxia telangiectasia, Li-Fraumeni…), y los individuos que las presentan tienen normalmente una mayor sensibilidad a la radiación solar y una mayor incidencia de tumores. Un individuo que no tenga ninguna de estas enfermedades podrá soportar una exposición moderada a las radiaciones gracias a los mecanismos que acabamos de explicar.
Pero, ¿y si la exposición a la radiación es demasiado larga?
ESTAN MINTIENDO, conocen perfectamente las caracteristicas de los coronavirus, Y POSIBLEMENTE LO HAN FABRICADO ELLOS.
Observese la INCONTESTABLE RELACION entre el virus y la RED DE 5G, LA CUAL, CONSIDERAMOS QUE LES SIRVE DE SOPORTE,
con arreglo a los datos de la RELACION entre electromagnetismo y BIOLOGIA, lo cual es campo de investigacion cientifica actualmente.
El conocimiento de la Historia Oculta de la Humanidad, nos vá a permitir interpretar el desarrollo actual de los acontecimientos:
Instituto de Magnetismo Aplicado (IMA)Campos electromagnéticos y efectos biológicosLa energía electromagnética es emitida en forma de ondas por las fuentes naturales y por numerosas fuentes artificiales. Esas ondas consisten en campos eléctricos y magnéticos oscilantes que se influyen recíprocamente y de diferentes formas con sistemas biológicos tales como células, plantas, animales o seres humanos. Para comprender mejor esa influencia recíproca, es indispensable conocer las propiedades físicas de las ondas que constituyen el espectro magnético.
Las ondas electromagnéticas pueden caracterizarse por su longitud, frecuencia o energía. Los tres parámetros se relacionan entre sí. Cada uno de ellos condiciona el efecto del campo sobre un sistema biológico.
La frecuencia de una onda electromagnética es en definitiva el número de veces que cambia el sentido del campo en la unidad de tiempo en un punto dado. Se mide en ciclos por segundo, o herzios.
Cuanto más corta es la longitud de onda, más alta es la frecuencia. Por ejemplo, el tramo intermedio de una banda de radiodifusión de amplitud modulada tiene una frecuencia de un millón de herzios (1 Mhz) y una longitud de onda de aproximadamente 300 metros. Los hornos de microondas utilizan una frecuencia de 2.450 millones de herzios (2,45 Ghz) y tienen una longitud de onda de 12 centímetros.
electromagnetic spectrum
Una onda electromagnética está formada por paquetes muy pequeños de energía llamados fotones. La energía de cada paquete o fotón es directamente proporcional a la frecuencia de la onda: Cuanta más alta es la frecuencia, mayor es la cantidad de energía contenida en cada fotón.
El efecto de las ondas electromagnéticas en los sistemas biológicos está determinado en parte por la intensidad del campo y en parte por la cantidad de energía contenida en cada fotón.
Las ondas electromagnéticas de baja frecuencia se denominan «campos electromagnéticos», y las de muy alta frecuencia, «radiaciones electromagnéticas». Según sea su frecuencia y energía, las ondas electromagnéticas pueden clasificarse en «radiaciones ionizantes» o «radiaciones no ionizantes».
Las radiaciones ionizantes son ondas electromagnéticas de frecuencia extremadamente elevada (rayos X y gamma), que contienen energía suficiente para producir la ionización (conversión de átomos o partes de moléculas en iones con carga eléctrica positiva o negativa) mediante la ruptura de los enlaces atómicos que mantienen unidas las moléculas en la célula.
Las radiaciones no ionizantes constituyen, en general, la parte del espectro electromagnético cuya energía es demasiado débil para romper enlaces atómicos. Entre ellas cabe citar la radiación ultravioleta, la luz visible, la radiación infrarroja, los campos de radiofrecuencias y microondas, los campos de frecuencias extremadamente bajas y los campos eléctricos y magnéticos estáticos.
Las radiaciones no ionizantes, aún cuando sean de alta intensidad, no pueden causar ionización en un sistema biológico. Sin embargo, se ha comprobado que esas radiaciones producen otros efectos biológicos, como por ejemplo calentamiento, alteración de las reacciones químicas o inducción de corrientes eléctricas en los tejidos y las células.
Las ondas electromagnéticas pueden producir efectos biológicos que a veces, pero no siempre, resultan perjudiciales para la salud. Es importante comprender la diferencia entre ambos:
Un efecto biológico se produce cuando la exposición a las ondas electromagnéticas provoca algún cambio fisiológico perceptible o detectable en un sistema biológico.
Un efecto perjudicial para la salud tiene lugar cuando el efecto biológico sobrepasa la capacidad normal de compensación del organismo y origina algún proceso patológico.
Algunos efectos biológicos pueden ser inocuos, como por ejemplo la reacción orgánica de incremento del riego sanguíneo cutáneo en respuesta a un ligero calentamiento producido por el sol. Algunos efectos pueden ser provechosos, como por ejemplo la sensación cálida de la luz solar directa en un día frío, o incluso beneficiosos para la salud, como es el caso de la función solar en la producción de vitamina D por el organismo. Sin embargo, otros efectos biológicos, como son las quemaduras solares o el cáncer de piel, resultan perjudiciales para la salud.
Es sabido que los campos de radiofrecuencias producen calentamiento e inducen corrientes eléctricas. Asimismo, se han notificado otros efectos biológicos menos probados.
Los campos de radiofrecuencias de frecuencia superior a 1 Mhz causan sobre todo calentamiento, al desplazar iones y moléculas de agua a través del medio al que éstos pertenecen. Incluso a niveles muy bajos, la energía de las radiofrecuencias produce pequeñas cantidades de calor, que son absorbidas por los procesos termorreguladores normales del organismo sin que el individuo lo perciba.
Los campos de radiofrecuencias de frecuencia inferior a 1 Mhz aproximadamente inducen principalmente cargas y corrientes eléctricas que pueden estimular células de tejidos tales como los nervios y los músculos. Las corrientes eléctricas están ya presentes en el organismo como parte normal de las reacciones químicas propias de la vida. Si los campos de radiofrecuencias inducen corrientes que excedan significativamente ese nivel de base en el organismo, es posible que se produzcan efectos perjudiciales para la salud.
Campos eléctricos y magnéticos de frecuencias extremadamente bajas: La acción primordial de estos campos en los sistemas biológicos es la inducción de cargas y corrientes eléctricas. Es poco probable que esa acción baste para explicar efectos sanitarios tales como el cáncer infantil, que se ha notificado como causado por la exposición a niveles «ambientales» de campos de frecuencias extremadamente bajas.
Campos eléctricos y magnéticos estáticos. Aunque la acción principal ejercida por esos campos en los sistemas biológicos es la inducción de cargas y corrientes eléctricas, se ha comprobado la existencia de otros efectos que, en principio, podrían resultar perjudiciales para la salud, pero sólo en campos de intensidades muy elevadas.
Selectividad, selectividad, posiblemente ya actualmente es posible: